

Las mesas extraíbles o suspendidas son las mejores opciones para poder comer en la cocina, sin necesidad de ocupar demasiado espacio. Este tipo de mesas, están escondidas mientras no las utilizamos, y cuando tenemos que hacer uso de ellas, tan sólo hay que sacarlas o desplegarlas para comer en ellas.
Lo cierto es que, no son demasiado cómodas, pero si no dispones de demasiado tiempo para sentarte a comer al mediodía, entonces es una alternativa perfecta para ti. En el mercado podrás encontrar un sinfín de modelos. Algunas saldrán de algún armario y otras directamente de la pared.
Por otra parte, no tienen por qué ser necesaria y exclusivamente para comer, puesto que no serán muy robustas ni de grandes dimensiones, así que otras de las utilidades que tienen es la de mesa auxiliar para preparar alimentos, por ejemplo. Un buen lugar para disponerla es debajo del microondas. De esta forma, podrás apoyar en ella las tazas o platos que quieres calentar, o quieres dejar enfriar un poco después de pasar por el micro.
Dependiendo del uso que le vayas a dar, podrás elegirla más estrecha (rectangular) o más ancha (cuadrada). El material de la mesa, dependerá del estilo que siga tu cocina. Si la corriente clásica es la predominante, entonces, es posible que tengas mobiliario de madera.
En este caso, una mesa de madera de un tono más claro o más oscuro, quedará ideal. En el caso de que tu cocina siga un estilo más moderno, entonces los materiales variarán entre el acero inoxidable, el plástico u otro material moderno. ¿Ya has decidido el material, el lugar y el color de tu mesa extraíble?
Fuente de la imagen: Kitchen Design Ideas