

Los expertos en diseño y decoración no dudan en afirmar que las curvas en decoración, como la que nos pueden proporcionar las ventanas de una vivienda, contribuyen a hacer los espacios mucho más versátiles, cálidos, cómodos, suaves y son capaces de alargar las dimensiones y formas de nuestra habitación.
Si nos fijamos, por ejemplo, en el diseño curvilíneo de otro elemento del inmueble como pueden ser las paredes, nos daremos cuenta de que, a diferencia de lo que sucede con las paredes convencionales, los muros curvados además de ofrecer un estilo moderno a la decoración, que romperá con las líneas tradicionales y monotonía predominante hasta el momento, nos acercarán una amplia variedad de posibilidades para decorar nuestra estancia.
Decoración suave y versátil a partir de ventanas curvadas
Ese estilo diferente en la decoración de nuestro hogar es lo que conseguiremos con la incorporación de ventanas curvadas. Al mismo tiempo, su presencia es capaz de crear impacto, conectar espacios y ofrecer mayor profundidad. En el caso de las terrazas, las ventanas curvadas pueden atraer la mirada hacia el exterior o el jardín. Esta tipología de ventanas se caracteriza por un proceso de elaboración más complejo, porque se deben curvar los perfiles que componen los marcos y las hojas.


Dependiendo del tipo de arco que conforma la ventana, nos podemos encontrar con diferentes modelos a tener en cuenta para incluir en nuestra decoración. Entre ellos destacamos los de curva de arco rebajado, cuando el ancho de la ventana supera en más del doble la altura de la curva. En este caso concreto, la curva y el palo recto conectan entre ambos a grados, en lugar de suavemente como sucede con el medio punto.
Por su parte, este último modelo se caracteriza por el hecho de que el ancho de ventana es el doble de la altura de la curva. Esta forma le permitirá suavizar el arranque de la curva a partir del palo vertical . En el mercado, podemos encontrar dos variantes enmarcadas dentro de este mismo modelo. Por un lado, que la curva esté soldada al palo vertical recto, siendo cada pieza totalmente independiente. Junto a esto último destacamos otra opción, en la que todo el perímetro del perfil sea una sola pieza porque únicamente se suelda el palo horizontal inferior.


Además de estos dos modelos, podemos encontrar otra modalidad conocida como curva en plantilla y que estaría formada por todos aquellos tipos que no responden a arcos homogéneos, porque la misma curva tiene incluidos diferentes radios. En este sentido, podemos encontrar los que se corresponden a huecos de obra ya definidos o los que se corresponden con ventanas dotadas de anchos de medida menor al doble de la altura de la ventana, entre otros muchos.
Precisamente, por el procedimiento de curvado de sus perfiles, las dimensiones de este tipo de ventanas se ven muy limitadas, tanto por el esfuerzo a nivel estructural al que se someten los perfiles en el momento de curvarlos, así como por las herramientas que intervienen en el proceso de curvado. El tipo de perfil, el color, radio y el arco a realizar se convierten en algunos de los factores determinantes a la hora de marcar los límites de este tipo de ventanas.
¿Y a vosotros?, ¿qué os parecen las ventanas curvadas para incluir en la decoración de vuestra habitación?