

Existen muchos y variados tipos de pérgolas, que podemos adaptar en función de nuestras necesidades. A veces no es fácil escoger la pérgola adecuada para nuestro hogar, por lo que será mejor que tengamos en cuenta algunos consejos básicos.
Consejos básicos al elegir una pérgola
- Pérgola fija o móvil. La decisión de comprar una pérgola fija o una móvil depende, en gran medida, del tamaño de la zona. Si el jardín o terraza es grande, lo más aconsejable es optar por una pérgola fija, que proteja constantemente el mobiliario que hayamos situado en ese espacio.
No obstante, si tenemos poco espacio, la pérgola móvil nos será más cómoda. Consta de cuatro soportes y un toldo, que puede montarse muy fácilmente y moverse de sitio según lo necesitemos. Además, son más económicas.


- Materiales. Es muy importante que nos decantemos por el material más adecuado a las características de nuestro hogar. Debe ser resistente y ligero al mismo tiempo, pues la pérgola estará continuamente expuesta a los cambios climatológicos. Normalmente son de madera, aluminio o plástico, siendo estas últimas las más recomendables (en parte, gracias a su facilidad para limpiarlas).
Las pérgolas de madera requieren un mayor mantenimiento, pero son igualmente una buena opción. Además, son muy decorativas. Las que están fabricadas con metal destacan por su resistencia y combinan con cualquier estilo decorativo.
- Sistema de evacuación del agua. Es imprescindible que al elegir una pérgola esta cuente con un sistema de evacuación de agua, que puede ser por canalización o por uno de los lados. De lo contrario, acumularía el agua de la lluvia hasta inundar la zona.
- Elementos de sujeción firmes. Los anclajes y los elementos de sujeción al suelo deben mantenerse bien anclados para que la pérgola pueda tener una estabilidad adecuada y no sea movida por el viento.
Fuente Imágenes por Leroy Merlin